Términos y Condiciones
Los Términos y Condiciones de Uso detallados a continuación tienen como objetivo regular la relación entre Centro de Atención Psicológica WANDELETHOS y los usuarios de nuestros servicios. Al acceder a nuestros servicios, usted acepta estar sujeto a estos términos y condiciones, así que le recomendamos leer cuidadosamente este documento. Si usted no está de acuerdo con alguno de los términos establecidos, le sugerimos que no utilice nuestros servicios.
Al continuar utilizando los servicios ofrecidos por Centro de Atención Psicológica WANDELETHOS, usted confirma que ha leído, entendido y aceptado estar sujeto a estos términos y condiciones, incluyendo cualquier modificación futura que podamos realizar, según lo estipulado en la cláusula pertinente sobre cambios y actualizaciones.
CONTACTO CON EL/LA PSICÓLOGO/A A CARGO
Después de concretar la cita en alguna de nuestras opciones, el psicólogo asignado se presentará con usted(es) en un periodo de 24 horas anteriores al horario programado de cita, este será vía WhatsApp, llamada telefónica o correo electrónico. De no tener respuesta antes de 12 horas anteriores a la cita, la sesión se verá cancelada.
TIEMPO DE SESIONES
Las sesiones normalmente tienen una duración aproximada de 55 a 60 minutos, por lo que encarecidamente pedimos puntualidad para su cita. En caso de llegar tarde, se trabajará bajo el tiempo restante de la consulta, debido a que frecuentemente se tienen sesiones consecutivas con otros pacientes. En la mayoría de los casos se realizan una vez a la semana. Habrá situaciones especiales, en las que, por la naturaleza de la intervención, puede ser necesario programar sesiones de mayor duración, de 90 a 120 minutos, en cuyo caso se discutirá y acordará previamente con el consultante. En el dado caso que su sesión rebase los 75 minutos, el costo de la sesión se verá incrementado.
COSTO DE SESIONES
Los honorarios tendrán que pagarse directamente a su terapeuta, ya sea en efectivo(al término de su sesión directamente con su terapeuta), transferencia (en caso de ser transferencia, enviar su comprobante 24 horas antes de su consulta) o terminal bancaria (sólo aplica para tarjetas de crédito), en caso de requerir factura agregar el IVA al costo normal de la sesión (16%) y enviar su comprobante, datos fiscales y constancia de situación fiscal al correo que se les indique.
En caso de pagar paquetes de promoción (4 sesiones) se puede pagar paquete tras paquete siempre y cuando sea un consultante responsable (no falte a sus sesiones, en caso de reagendar avise antes de 24 horas). Los paquetes tienen una vigencia de 5 semanas.
En caso de requerir reembolso (sólo aplica un mes después del pago) dejaría de aplicarse promoción, es decir, se cobraría la sesión a costo normal.
Ejemplo: Pague un paquete de $550 o 4 sesiones por $2000 y tuve 3 sesiones efectivas (no cancele, ni falte sin previo aviso a mi sesión), se cobrarían 3 sesiones de $550 = $1650, mi reembolso sería de $350.
CANCELACIÓN Y REAGENDAMIENTO DE CITAS
El centro, al otorgarle un horario de cita, respetará ese mismo horario para sesiones posteriores semana a semana y no se le asignará a ninguna otra persona. Si desea algún cambio tanto de hora como de fecha, tendrá que apegarse a la disponibilidad del psicólogo asignado a su caso.
En caso de que sea la primera cita y sea cancelada por parte del consultante, para reagendar tendrá que pagar por anticipado el costo total de su sesión y en caso de volver a cancelar o no asistir no hay devoluciones, ya que se les apartó el espacio. En caso de que tenga que cancelarla o reprogramarla, por favor informe con un período de anticipación de por lo menos 24 horas, con el fin de que pueda ser reasignado el espacio a otra persona. En caso de no asistir a una sesión sin cancelar previamente, se harán responsables financieramente por concepto de sesión perdida, abonando los honorarios (costo total) correspondientes a la sesión, al inicio de la siguiente, a menos que se trate de un motivo excepcional o de fuerza mayor (enfermedad, hospitalización, accidente o situaciones fuera del control y se tendrá que avisar en la medida de lo posible y sino presentar alguna prueba foto, receta, etc.).
Por la alta demanda de asistencia psicológica, al existir dos faltas consecutivas el horario reservado para su terapia quedará condicionado a la disponibilidad del centro y terapeuta, lo anterior como resultado de que se requiere responsabilidad y constancia para que el proceso terapéutico sea efectivo, ya que se fortalece sesión a sesión.
En el caso de que el paciente no asista a 3 sesiones consecutivas, sin previo aviso, se da por finalizado el tratamiento terapéutico y el profesional se encontrará exento de toda responsabilidad terapéutica y legal respecto del paciente y su accionar.
¡Permítame darle la bienvenida! En este documento encontrará información importante sobre los servicios profesionales y las reglas de funcionamiento sobre los derechos de los pacientes. Aunque este documento puede ser un poco largo, es muy importante que lo lea y lo entienda. Al firmarlo, indica que está de acuerdo con las reglas del trabajo que vamos a realizar en conjunto.
SERVICIOS PSICOLÓGICOS
La terapia psicológica es una relación entre personas que trabajan profesionalmente en colaboración, en búsqueda del objetivo común de mejorar la calidad de vida y aumentar el bienestar psicológico del consultante. Por lo tanto, conlleva derechos y responsabilidades por parte de cada uno.
Antes de decidir iniciar el proceso, es muy importante que entienda con claridad sus derechos y responsabilidades tanto para ustedes, padres de familia, como para su hijo (a). Nosotros, como terapeutas, también tenemos responsabilidades. En los siguientes párrafos se describen esos derechos y responsabilidades.
- La terapia psicológica tiene al mismo tiempo beneficios y riesgos. En el proceso terapéutico con frecuencia es necesario hablar o enfrentar aspectos dolorosos de nuestra vida. Los riesgos pueden incluir la posibilidad de sentir sensaciones desagradables o incómodas, como, por ejemplo, malestar, ansiedad, tristeza, rabia, frustración, etc. Sin embargo, las terapias psicológicas que están basadas en evidencia han demostrado en múltiples estudios de investigación que tienen efectos benéficos para las personas que llevan a cabo el proceso y cumplen con las indicaciones. La terapia psicológica puede producir una reducción importante de malestar psicológico y emocional. Por otra parte, puede ayudar a aumentar los niveles generales de satisfacción hacia la vida y hacia nuestras relaciones interpersonales, así como el nivel de autoconocimiento y conciencia vital. Además, puede ayudarle, a través de herramientas concretas, a afrontar nuevas situaciones y tener un mejor manejo de fuentes de tensión o de estrés, y generar estrategias efectivas de solución de problemas.
Tenemos la responsabilidad de ofrecerle el tratamiento psicológico que más se adecúe a las problemáticas que lo traen a terapia. Lo anterior se desarrolla a través de un proceso exhaustivo de evaluación, utilizando diversos métodos para la recolección de información (e. g., pruebas psicométricas, entrevistas estructuradas o semiestructuradas, cuestionarios, etc.). Una vez terminado el proceso de evaluación, se le informará sobre el tratamiento que el terapeuta ha seleccionado para su caso. Nuestro compromiso es dedicarle el tiempo necesario, el conocimiento profesional actualizado y los esfuerzos que estén dentro de nuestras posibilidades para lograr los objetivos terapéuticos propuestos.
- La primera sesión es dedicada únicamente a los padres o tutores con la finalidad de conocer el motivo de consulta por el cual desean que su hijo(a) asista a terapia psicológica, así como también conocer el contexto familiar, escolar, social, salud en el que se encuentra el menor. La segunda sesión se dedicara al menor, donde se iniciará la fase de evaluación -entrevista-, sólo si es necesario se aplicarán pruebas psicológicas. Al finalizar la evaluación se volverá a citar a los padres o tutores para una sesión de devolución para conocer los resultados y el programa de intervención con la finalidad de que exista una participación de los padres en el cambio o evolución del menor.
- En caso de que el menor sea adolescente y haya solicitado por propia cuenta a sus padres el servicio de psicología, la primera entrevista será con el menor. En caso de que el terapeuta lo considere necesario, pedirá una entrevista con los padres/tutores del adolescente. De no ser considerado necesario, el proceso se llevará a cabo exclusivamente con el adolescente.
- Los resultados de la terapia dependen de varios factores, entre ellos un papel activo por parte del consultante y de sus padres (cuando el terapeuta así lo valora). El terapeuta trabaja con la información que los consultantes brindan, por lo que omitir o falsear información de parte de alguno o ambos consultantes dificulta el proceso y deslinda de responsabilidad al terapeuta. Para aumentar la probabilidad de que los resultados esperados se alcancen, es necesario que sigan las indicaciones, realicen las tareas o actividades planteadas y practiquen lo acordado fuera de las sesiones en el consultorio. Aunque no es posible conocer de antemano el número de sesiones hay un claro compromiso de nuestra parte, de que el tratamiento tenga la mínima duración necesaria para lograr los objetivos propuestos. Por lo general el tratamiento puede tener una media de duración aproximada de 14 sesiones (esto puede variar dependiendo de la naturaleza del problema, de las condiciones de aplicación y de la adherencia y constancia al tratamiento).
Es de suma importancia que el paciente menor siempre venga acompañado de un adulto, si decide dejarlo para su sesión y aprovechar el tiempo para ir a otro lugar se deberá recoger a sus hijos en su hora de finalización de sesión, por ninguna instancia se podrán ir solos.
DERECHO A SUSPENDER EL TRATAMIENTO
Usted tiene el derecho de suspender el tratamiento en el momento en el que desee. Sin embargo, es recomendable que le manifieste su decisión a su terapeuta con el fin de que el mencionado tenga oportunidad de dar retroalimentación y recomendaciones. De la misma forma, el terapeuta puede decidir suspender el tratamiento si considera que no está́ siendo benéfico para sus objetivos, si hay retrasos o cancelaciones reiteradas o si no hay suficiente cumplimiento o adherencia a las recomendaciones terapéuticas. En tales casos, aunque se puede hacer sugerencias de tratamiento alternativo, usted tiene la responsabilidad de buscar otras alternativas de atención profesional de salud mental.
CONFIDENCIALIDAD Y LÍMITES
De acuerdo con lo establecido en Código de ética de las y los psicólogos mexicanos, en el artículo 36, los datos se recogerán con la única finalidad de elaborar los documentos derivados de esta intervención profesional, historias clínicas, su facturación, seguimiento posterior y las funciones propias de la actividad profesional que los justifica. La totalidad de la información, está cobijada por el secreto profesional. En qué caso de que, por algún motivo, como interconsulta profesional o informe psicológico solicitado, solamente se podrá suministrar información específica, previa aprobación de padres o tutores.
El consultante menor tiene derecho a que el terapeuta guarde confidencialidad sobre lo trabajado en las sesiones de terapia, pero le autoriza informar a sus padres o tutores de manera general sin dar detalles de su evolución. Sin embargo, el psicólogo está obligado a revelar ante las instancias oportunas la información confidencial en aquellas situaciones que pudiera presentar un riesgo muy grave, ya sea a los padres, terceras personas o bien porque así fuera ordenado jurídicamente. Por lo tanto, tenemos la responsabilidad de valorar la gravedad de la situación para establecer el límite de confidencialidad.
Permítame darle la bienvenida. En este documento encontrará información importante sobre los servicios profesionales y las reglas de funcionamiento sobre los derechos de los pacientes. Aunque este documento puede ser un poco largo, es muy importante que lo lea y lo entienda. Al firmarlo, indica que está de acuerdo con las reglas del trabajo que vamos a realizar en conjunto.
SERVICIOS PSICOLÓGICOS
La terapia psicológica es una relación entre personas que trabajan profesionalmente en colaboración, en búsqueda del objetivo común de mejorar la calidad de vida y aumentar el bienestar psicológico del consultante. Por lo tanto, conlleva derechos y responsabilidades por parte de cada uno. Antes de decidir iniciar el proceso, es muy importante que entienda con claridad sus derechos y responsabilidades como consultante. Nosotros, como terapeutas, también tenemos responsabilidades hacia usted. En los siguientes párrafos se describen esos derechos y responsabilidades.
- La terapia psicológica tiene al mismo tiempo beneficios y riesgos. En el proceso terapéutico con frecuencia es necesario hablar o enfrentar aspectos dolorosos de nuestra vida. Los riesgos pueden incluir la posibilidad de sentir sensaciones desagradables o incómodas, como por ejemplo: malestar, ansiedad, tristeza, rabia, frustración, etc. Sin embargo, las terapias psicológicas que están basadas en evidencia han demostrado en múltiples estudios de investigación que tienen efectos benéficos para las personas que llevan a cabo el proceso y cumplen con las indicaciones. La terapia psicológica puede producir una reducción importante de malestar psicológico y emocional. Por otra parte, puede ayudar a aumentar los niveles generales de satisfacción hacia la vida y hacia nuestras relaciones interpersonales, así como el nivel de autoconocimiento y conciencia vital. Además, puede ayudarle a través de herramientas concretas para afrontar nuevas situaciones y tener un mejor manejo de fuentes de tensión o de estrés y generar estrategias efectivas de solución de problemas.
Tenemos la responsabilidad de ofrecerle el tratamiento psicológico que más se adecúe a las problemáticas que lo traen a terapia. Lo anterior se desarrolla a través de un proceso exhaustivo de evaluación, utilizando diversos métodos para la recolección de información (e. g., pruebas psicométricas, entrevistas estructuradas o semiestructuradas, cuestionarios, etc.). Una vez terminado el proceso de evaluación, se le informará sobre el tratamiento que el terapeuta ha seleccionado para su caso. Nuestro compromiso es dedicarle el tiempo necesario, el conocimiento profesional actualizado y los esfuerzos que estén dentro de nuestras posibilidades para lograr los objetivos terapéuticos propuestos.
- En las primeras 2 ó 3 sesiones, realizamos una evaluación exhaustiva de su contexto, estilo de vida, estado psicológico e historia personal pertinente, así como de sus necesidades y, con base en eso, acordaremos en forma conjunta los objetivos específicos de trabajo, como los indicadores concretos de progreso. Al final de la evaluación, discutiremos la formulación clínica sobre la naturaleza y causas de su condición particular, sus necesidades específicas y sus valores y objetivos vitales, que servirán de guía en el proceso de planeación, diseño y evaluación del proceso terapéutico; y a partir de la tercera sesión comienza la etapa de intervención, donde se perseguirán los objetivos previamente establecidos.
- Los resultados de la terapia dependen de varios factores, entre ellos un papel activo por parte del consultante. El terapeuta trabaja con la información que los consultantes brindan, por lo que omitir o falsear información dificulta el proceso y deslinda de responsabilidad al terapeuta. Para aumentar la probabilidad de que los resultados esperados se alcancen, es necesario que sigan las indicaciones, realicen las tareas o actividades planteadas y practiquen lo acordado fuera de las sesiones en el consultorio. Aunque no es posible conocer de antemano el número de sesiones hay un claro compromiso de nuestra parte, de que el tratamiento tenga la mínima duración necesaria para lograr los objetivos propuestos. Por lo general el tratamiento puede tener una media de duración aproximada de 14 sesiones (esto puede variar dependiendo de la naturaleza del problema, de las condiciones de aplicación y de la adherencia y constancia al tratamiento).
DERECHO A SUSPENDER EL TRATAMIENTO
Usted tiene el derecho de suspender el tratamiento en el momento en el que lo desee. Sin embargo, es recomendable que le manifieste la decisión a su terapeuta con el fin de que el mencionado tenga oportunidad de dar retroalimentación y recomendaciones. De la misma forma, el terapeuta puede decidir suspender el tratamiento si considera que no está siendo benéfico para sus objetivos, si hay retrasos o cancelaciones reiteradas o si no hay suficiente cumplimiento o adherencia a las recomendaciones terapéuticas. En tales casos, aunque se puede hacer sugerencias de tratamiento alternativo, usted tiene la responsabilidad de buscar otras alternativas de atención profesional de salud mental.
CONFIDENCIALIDAD Y LÍMITES
De acuerdo con lo establecido en Código de Ética de las y los Psicólogos Mexicanos, en el artículo 36, la información que el terapeuta recolecte sobre el consultante, tiene la única finalidad de ser utilizada para la elaboración de los documentos derivados de esta intervención profesional, historias clínicas, su facturación, seguimiento posterior y las funciones propias de la actividad profesional que los justifica. La totalidad de la información está cobijada por el secreto profesional. En caso de que, por algún motivo, como interconsulta profesional o informe psicológico solicitado, solamente se podrá suministrar información específica con la previa aprobación escrita del consultante. Sin embargo, la confidencialidad tiene un límite de acuerdo al artículo 36, dentro del cual se estipula que sólo puede levantarse por una orden judicial, y cuando la vida del paciente o terceros corra peligro. Por lo tanto, tenemos la responsabilidad de valorar la gravedad de la situación para establecer el límite de confidencialidad.
¡Permítame darle la bienvenida! En este documento encontrarán información importante sobre los servicios profesionales y las reglas de funcionamiento sobre los derechos de los pacientes. Aunque este documento puede ser un poco largo, es muy importante que lo lea y lo entienda. Al firmarlo, indica que está de acuerdo con las reglas del trabajo que vamos a realizar en conjunto.
SERVICIOS PSICOLÓGICOS
La terapia psicológica de pareja es una relación entre personas que trabajan profesionalmente en colaboración, en búsqueda del objetivo común de mejorar la calidad de vida y aumentar el bienestar psicológico de las personas involucradas en la dinamica de pareja. Por lo tanto, conlleva derechos y responsabilidades por parte de cada uno. Antes de decidir iniciar el proceso, es muy importante que entienda con claridad sus derechos y responsabilidades como consultante. Nosotros, como terapeutas, también tenemos responsabilidades hacia usted. En los siguientes párrafos se describen esos derechos y responsabilidades.
- La terapia psicológica de pareja tiene al mismo tiempo beneficios y riesgos. En el proceso terapéutico con frecuencia es necesario hablar o enfrentar aspectos dolorosos de nuestra vida o relación. Los riesgos pueden incluir la posibilidad de sentir sensaciones desagradables o incómodas, como por ejemplo: malestar, ansiedad, tristeza, rabia, frustración, etc. Sin embargo, las terapias psicológicas que están basadas en evidencia han demostrado en múltiples estudios de investigación que tienen efectos benéficos para las personas que llevan a cabo el proceso y cumplen con las indicaciones. La terapia psicológica de pareja puede producir una reducción importante de malestar psicológico y emocional. Por otra parte, puede ayudar a aumentar los niveles generales de satisfacción hacia la vida y hacia nuestras relaciones interpersonales, así como el nivel de autoconocimiento y conciencia vital. Además, puede ayudarle a través de herramientas concretas para afrontar nuevas situaciones y tener un mejor manejo de fuentes de tensión o de estrés y generar estrategias efectivas de solución de problemas.
Tenemos la responsabilidad de ofrecerle el tratamiento psicológico que más se adecúe a las problemáticas que lo traen a terapia. Lo anterior se desarrolla a través de un proceso exhaustivo de evaluación, utilizando diversos métodos para la recolección de información (e. g., pruebas psicométricas, entrevistas estructuradas o semiestructuradas, cuestionarios, etc.). Una vez terminado el proceso de evaluación, se le informará sobre el tratamiento que el terapeuta ha seleccionado para su caso. Nuestro compromiso es dedicarle el tiempo necesario, el conocimiento profesional actualizado y los esfuerzos que estén dentro de nuestras posibilidades para lograr los objetivos terapéuticos propuestos.
En el caso de terapia de pareja, el proceso se divide en sesiones grupales y sesiones individuales. La primera sesión es importante asistan los dos para que se les tomen sus datos, señalen la problemática y la expectativa que tiene cada uno al asistir a sesión, de acuerdo a esta información el terapeuta decide si la primera sesión se lleva a cabo con ambos miembros de la pareja y las siguientes 1 ó 2 sesiones son llevadas a cabo de forma individual; o bien si la primera y segunda sesión se lleva de forma individual y la 3era en conjunto. En esta primera etapa realizamos una evaluación exhaustiva de su contexto, estilo de vida, estado psicológico, historia personal y de la relación, así como de sus necesidades y, con base en eso, acordaremos en forma conjunta los objetivos específicos de trabajo, como los indicadores concretos de progreso. Al final de la evaluación, discutiremos la formulación clínica sobre la naturaleza y causas de su condición particular, sus necesidades específicas, sus valores y objetivos vitales, que servirán de guía en el proceso de planeación, diseño y evaluación del proceso terapéutico; y a partir de la tercera o cuarta sesión comienza la etapa de intervención, donde se perseguirán los objetivos previamente establecidos.
- Los resultados de la terapia dependen de varios factores, entre ellos la disposición y el papel activo por parte de ambos consultantes. El terapeuta trabaja con la información que los consultantes brindan, por lo que omitir o falsear información de parte de alguno o ambos consultantes dificulta el proceso y deslinda de responsabilidad al terapeuta. Para aumentar la probabilidad de que los resultados esperados se alcancen, es necesario que sigan las indicaciones, realicen las tareas o actividades planteadas y practiquen lo acordado fuera de las sesiones en el consultorio. Aunque no es posible conocer de antemano el número de sesiones, hay un claro compromiso de nuestra parte, de que el tratamiento tenga la mínima duración necesaria para lograr los objetivos propuestos. Por lo general, el tratamiento puede tener una media de duración aproximada de 14 sesiones (esto puede variar dependiendo de la naturaleza del problema, de las condiciones de aplicación y de la adherencia y constancia al tratamiento).
DERECHO A SUSPENDER EL TRATAMIENTO
Ustedes tienen el derecho de suspender el tratamiento en el momento en el que lo deseen. Sin embargo, es recomendable que le manifiesten la decisión a su terapeuta con el fin de que el mencionado tenga oportunidad de dar retroalimentación y recomendaciones. De la misma forma, el terapeuta puede decidir suspender el tratamiento si considera que no está siendo benéfico para sus objetivos, si hay retrasos o cancelaciones reiteradas o si no hay suficiente cumplimiento o adherencia a las recomendaciones terapéuticas por alguno de los integrantes. En tales casos, aunque se puede hacer sugerencias de tratamiento alternativo, usted tiene la responsabilidad de buscar otras alternativas de atención profesional de salud mental.
En caso de existir violencia de algún tipo de parte de uno de los integrantes o de ambos, se firmará el contrato conductual para la eliminación de ese tipo de conductas (a consideración del terapeuta, dependiendo del tipo de violencia) y en caso de incumplirse el terapeuta tendrá que suspender el proceso de terapia de pareja y hacer la recomendación de terapia individual para ambos participantes (reservándose el derecho de atenderles en terapia individual a alguno de los integrantes y valorar el riesgo por si es necesario remitir a asistencia legal).
CONFIDENCIALIDAD Y LÍMITES
De acuerdo con lo establecido en Código de Ética de las y los Psicólogos Mexicanos en el artículo 36, la información que el terapeuta recolecte sobre el consultante, tiene la única finalidad de ser utilizada para la elaboración de los documentos derivados de esta intervención profesional, historias clínicas, su facturación, seguimiento posterior y las funciones propias de la actividad profesional que los justifica. La totalidad de la información está cobijada por el secreto profesional. En caso de que, por algún motivo, como interconsulta profesional o informe psicológico solicitado, solamente se podrá suministrar información específica con la previa aprobación escrita del consultante. Sin embargo, la confidencialidad tiene un límite de acuerdo al artículo 36, dentro del cual se estipula que sólo puede levantarse por una orden judicial, y cuando la vida de uno de los integrantes de la pareja o terceros corra peligro. Por lo tanto, tenemos la responsabilidad de valorar la gravedad de la situación para establecer el límite de confidencialidad.
Cada integrante de la pareja tiene derecho a que el terapeuta guarde confidencialidad sobre lo trabajado en las sesiones que se llevan de forma individual.
¡Permítame darle la bienvenida!. En este documento encontrarán información importante sobre los servicios profesionales y las reglas de funcionamiento sobre los derechos de los pacientes. Aunque este documento puede ser un poco largo, es muy importante que lo lean y lo entiendan. Al firmarlo, indican que están de acuerdo con las reglas del trabajo que vamos a realizar en conjunto.
SERVICIOS PSICOLÓGICOS
La terapia psicológica familiar es una relación entre personas que trabajan profesionalmente en colaboración, en búsqueda del objetivo común de mejorar la calidad de vida y aumentar el bienestar psicológico de las personas involucradas en la dinámica familiar. Por lo tanto, conlleva derechos y responsabilidades por parte de cada uno. Antes de decidir iniciar el proceso, es muy importante que entiendan con claridad sus derechos y responsabilidades como consultantes. Nosotros, como terapeutas, también tenemos responsabilidades hacia usted. En los siguientes párrafos se describen esos derechos y responsabilidades.
- La terapia psicológica familiar tiene al mismo tiempo beneficios y riesgos. En el proceso terapéutico con frecuencia es necesario hablar o enfrentar aspectos dolorosos de nuestra vida. Los riesgos pueden incluir la posibilidad de sentir sensaciones desagradables o incómodas, como por ejemplo: malestar, ansiedad, tristeza, rabia, frustración, etc. Sin embargo, las terapias psicológicas que están basadas en evidencia han demostrado en múltiples estudios de investigación que tienen efectos benéficos para las personas que llevan a cabo el proceso y cumplen con las indicaciones. La terapia psicológica familiar puede producir una reducción importante de malestar psicológico y emocional. Por otra parte, puede ayudar a aumentar los niveles generales de satisfacción hacia la vida y hacia nuestras relaciones interpersonales, así como el nivel de autoconocimiento y conciencia vital. Además, pueden ayudarles a través de herramientas concretas para afrontar nuevas situaciones y tener un mejor manejo de fuentes de tensión o de estrés y generar estrategias efectivas de solución de problemas.
Tenemos la responsabilidad de ofrecerles el tratamiento psicológico que más se adecúe a las problemáticas que lo traen a terapia. Lo anterior se desarrolla a través de un proceso exhaustivo de evaluación, utilizando diversos métodos para la recolección de información (e. g., pruebas psicométricas, entrevistas estructuradas o semiestructuradas, cuestionarios, etc.). Una vez terminado el proceso de evaluación, se les informará sobre el tratamiento que el terapeuta ha seleccionado para su caso. Nuestro compromiso es dedicarles el tiempo necesario, el conocimiento profesional actualizado y los esfuerzos que estén dentro de nuestras posibilidades para lograr los objetivos terapéuticos propuestos.
En el caso de terapia familiar, el proceso se divide en sesiones grupales y sesiones individuales. La primera sesión es importante asistan todos los integrantes de la familia involucrados en la situación a resolver, para que se les tomen sus datos, señalen la problemática y la expectativa que tiene cada uno al asistir a sesión, de acuerdo a esta información el terapeuta decide si la primera sesión se lleva a cabo con varios o todos los integrantes de la familia y las siguientes sesiones son llevadas a cabo de forma individual; o bien si las primeras se lleva de forma individual y la 3era o 4ta en conjunto (esto depende de la problemática y del número de integrantes de la familia). En esta primera etapa realizamos una evaluación exhaustiva de su contexto, estilo de vida, estado psicológico, historia personal y de la relación, así como de sus necesidades y, con base en eso, acordaremos en forma conjunta los objetivos específicos de trabajo, como los indicadores concretos de progreso. Al final de la evaluación, discutiremos la formulación clínica sobre la naturaleza y causas de su condición particular, sus necesidades específicas, sus valores y objetivos vitales, que servirán de guía en el proceso de planeación, diseño y evaluación del proceso terapéutico; y a partir de la tercera o cuarta sesión comienza la etapa de intervención, donde se perseguirán los objetivos previamente establecidos.
- Los resultados de la terapia dependen de varios factores, entre ellos la disposición y el papel activo por parte de los consultantes. El terapeuta trabaja con la información que los consultantes brindan, por lo que omitir o falsear información de parte de uno o varios consultantes dificulta el proceso y deslinda de responsabilidad al terapeuta. Para aumentar la probabilidad de que los resultados esperados se alcancen, es necesario que sigan las indicaciones, realicen las tareas o actividades planteadas y practiquen lo acordado fuera de las sesiones en el consultorio. Aunque no es posible conocer de antemano el número de sesiones hay un claro compromiso de nuestra parte, de que el tratamiento tenga la mínima duración necesaria para lograr los objetivos propuestos. Por lo general el tratamiento puede tener una media de duración aproximada de 14 sesiones (esto puede variar dependiendo de la naturaleza del problema, de las condiciones de aplicación, de la adherencia y constancia al tratamiento).
DERECHO A SUSPENDER EL TRATAMIENTO
Ustedes tienen el derecho de suspender el tratamiento en el momento en el que lo deseen. Sin embargo, es recomendable que le manifiesten la decisión a su terapeuta con el fin de que el mencionado tenga oportunidad de dar retroalimentación y recomendaciones. De la misma forma, el terapeuta puede decidir suspender el tratamiento si considera que no está siendo benéfico para sus objetivos, si hay retrasos o cancelaciones reiteradas o si no hay suficiente cumplimiento o adherencia a las recomendaciones terapéuticas por alguno de los integrantes. En tales casos, aunque se puede hacer sugerencias de tratamiento alternativo, usted tiene la responsabilidad de buscar otras alternativas de atención profesional de salud mental.
En caso de existir violencia de algún tipo de parte de uno de los integrantes o de varios, se firmará el contrato conductual para la eliminación de ese tipo de conductas (a consideración del terapeuta, dependiendo del tipo de violencia) y en caso de incumplirse el terapeuta tendrá que suspender el proceso de terapia familiar y hacer la recomendación de terapia individual para los involucrados (reservándose el derecho de atenderles en terapia individual a alguno de los integrantes y valorar el riesgo por si es necesario remitir a asistencia legal).
CONFIDENCIALIDAD Y LÍMITES
De acuerdo con lo establecido en Código de Ética de las y los Psicólogos Mexicanos en el artículo 36, la información que el terapeuta recolecte sobre el consultante, tiene la única finalidad de ser utilizada para la elaboración de los documentos derivados de esta intervención profesional, historias clínicas, su facturación, seguimiento posterior y las funciones propias de la actividad profesional que los justifica. La totalidad de la información está cobijada por el secreto profesional. En caso de que, por algún motivo, como interconsulta profesional o informe psicológico solicitado, solamente se podrá suministrar información específica con la previa aprobación escrita del consultante. Sin embargo, la confidencialidad tiene un límite de acuerdo al artículo 36, dentro del cual se estipula que sólo puede levantarse por una orden judicial, y cuando la vida de uno de los integrantes o terceros corra peligro. Por lo tanto, tenemos la responsabilidad de valorar la gravedad de la situación para establecer el límite de confidencialidad.
Cada integrante de la familia tiene derecho a que el terapeuta guarde confidencialidad sobre lo trabajado en las sesiones que se llevan de forma individual.